ApellidosSignificado del Apellido De herrera

¿Qué es el apellido?

El apellido es el nombre antroponímico de la familia con que se distingue a las personas.

¿Qué significado tiene el apellido De herrera?

Apellido de origen toponímico, mas frecuente como Herrera que como “de Herrera”, siendo ésta segunda la antigua forma de escritura del apellido, que tuvo su origen en aquellos lugares que en España se laman Herrera, con el significado de “herrería”, del antiguo vocablo castellano ferrera, derivado del latín ferrum, “hierro”. El historiador Argote de Molina dice que los documentos más antiguos referentes a los Herrera se conservan en el archivo de Santa María de Aguilar de Campoó (Palencia).

Se trata de una escritura del año 1163 que otorgó doña Elvira de Villamar, de la que fue testigo Gonzalo Peláez de Herrera, y otra del año 1229 de venta de ciertas heredades en Valdeguña, que otorgó Ruiz Días de la Vega, a Gómez Malric, en la cual se hace memoria de Garci González de Herrera, que fue Merino Mayor de Castilla por el Rey don Fernando III “El Santo” y confirmador, en el año 1230, de un privilegio dado por el Rey a la villa de Santillana (Cantabria).

En el repartimiento de Sevilla, en el año 1253, se hace memoria de D. Pelayo de Herrera, Caballero de la mesnada del Rey, y de Esteban de Herrera, uno de los doscientos Caballeros que en ella fueron heredados. Los Herrera o “de Herrera” de las distintas casas probaron su nobleza e hidalguía, a lo largo de varios siglos, antes las Reales Chancillerías de Valladolid y de Granada, así como para su ingreso en las antiguas órdenes militares. Armas.- Unos Herrera o “de Herrera”: De gules, con dos calderas de oro, puestas en palo.

Apellido de origen toponímico, bastante frecuente y repartido por España e Hispanoamérica, procedente de los lugares que en España se laman Herrera, con el significado de “herrería”, del antiguo vocablo castellano –ferrera-, derivado del latín –ferrum-, “hierro”. Hubo, por tanto, distintas familias apellidadas Herrera, no emparentadas entre sí, pues fueron muchos los individuos que, siendo naturales u originarios de algún lugar llamado Herrera, tomaron su nombre como sobrenombre o apodo, según fue costumbre en la Edad Media, convirtiéndolo después, por el uso y la costumbre, en apellido.

El historiador Argote de Molina dice que algunos de los documentos más antiguos referentes a familias apellidadas Herrera se conservan en el archivo de Santa María de Aguilar de Campoó (Palencia). Se trata de una escritura del año 1163 que otorgó doña Elvira de Villamar, de la que fue testigo Gonzalo Peláez de Herrera, y otra del año 1229 de venta de ciertas heredades en Valdeguña, que otorgó Ruiz Días de la Vega, a Gómez Malric, en la cual se hace memoria de Garci González de Herrera, que fue Merino Mayor de Castilla por el Rey don Fernando III “El Santo”, y confirmador, en el año 1230, de un privilegio dado por el Rey a la villa de Santillana (Cantabria).

En el repartimiento que en Sevilla de hizo entre los Caballeros cristianos de las tierras y propiedades ganadas a los moros, en el año 1253, se hace memoria de D. Pelayo de Ferrera, Caballero de la mesnada del Rey, y de Esteban de Ferrera, uno de los doscientos Caballeros que en ella fueron heredados. Los Herrera de las distintas casas probaron su nobleza e hidalguía, a lo largo de varios siglos, antes las Reales Chancillerías de Valladolid y de Granada, además de ante otros Tribunales, así como para su ingreso en las antiguas órdenes militares, para el desempeño de cargos ante el Santo Oficio de la Inquisición, etc. Armas.- Unos Herrera: De gules, con dos calderas de oro, puestas en palo.