HogarHogar: Cómo cultivar arándanos

Los arándanos pertenecen a la familia de las ericaceas, un tipo de planta subarbustiva como el madriño, el brezo o la gayuba. Este particular arbusto cuenta con más de 450 especies en las zonas más frías de Europa, América y Asia. Cultivar este tipo de planta tiene un interés especial dado que proporciona frutos silvestres comestibles y, a la vez, su vivacidad durante el otoño y el color de sus hojas hace que sea perfecta para la decoración del hogar. Entre las principales variedades de arándanos destacan los productores de frutos más sabrosos como el Bluecrop, el Patriot o el Earliblue, entre muchos otros.

En Perudalia te contamos los beneficios de los arándanospara que veas lo saludables que pueden llegar a ser.

¿Cómo son los arándanos? Las plantas están compuestas por unas bonitas hojas de color verde, con mucho brillo y, aunque generalmente son lisas, también podemos encontrarlas dentadas. En cuanto a las flores del arándano, suelen ser de color blanco, aunque las puedes encontrar, también, de colores rosas, púrpuras o rojos.

Sus frutos pueden recogerse, dado que son comestibles en crudo y, también, podrás preparar con ellos ricas compotas, mermeladas, zumos o conservas variadas. Todo un placer. En Perudalia te damos la receta de la mermelada de arándanospara que empieces a disfrutar de su impecable sabor.

Como cualquier planta silvestre, el arándano está acostumbrado a crecer en lugares sombreados, no obstante, si estás pensando en plantar un arándano en casa debes saber que darán mejores frutos y rendirán más si les da algo el sol. Por ello, lo más aconsejable es colocar el arbusto en una zona de semisombra.

Otro aspecto que debes tener en cuenta es que el arándano necesita luz - aunque no toda directa - pero no soporta el viento , por lo que es necesario resguardar o proteger el arbusto mediante empalizadas o setos.

Su preferencia son los climas húmedos, por delante de los secos y les encanta la influencia del mar. Así que el mejor clima para cultivar un arándano es entre templado y frío , es decir, el que se caracteriza por tener días no muy calurosos y noches frescas. Debes tener en cuenta que, siendo un arbusto silvestre, el arándano soporta las heladas del invierno, dado que es una planta de frío. Las bajas temperaturas, contribuyen a que no se adelante la floración y, a su vez, permiten que ésta sea más abundante, uniforme y bella.

Si la zona donde resides y donde vas a plantar el arándano es lluviosa, no hará falta regar el arbusto. Eso sí, durante los días más calurosos del verano el riego será necesario. Procura que el agua que le aportarás al arándano esté libre de cloro, calcio o sodio. Si vas a hacer una gran plantación de arándanos, lo recomendable es utilizar el riego por goteo, para que el arbusto aproveche completamente los nutrientes del agua.

Aunque existen diversas técnicas de plantación , debemos destacar las tres más utilizadas:

• Plantas con raíces : las mismas raíces hacen de este método el más seguro y eficaz, dado que se adaptarán más rápido al terreno, proporcionando arbustos de mayor calidad y libres de enfermedades.
• Esquejes : deben recogerse a finales de verano ramas tiernas de unos 10 cm y plantarlas a finales de otoño, preparando la tierra previamente con hoyos de 5 cm de profundidad. Planta cuantos más esquejes mejor (separados entre ellos entre 140 y 150 cm). Aquellos que logren echar raíces producirán frutos a finales de verano.
• Acodo : método que debe usarse durante la mitad o el final del verano. Debes doblar una de las ramas tiernas del arándano y plantar en el suelo la punta (unos 6 cm). Esta propia rama generará más raíces que traerán consigo un nuevo arbusto. Es importante que las separes cuando pase el primer año y que coloques el arándano en su espacio de crecimiento definitivo.

Es importante podar los arándanos y prepararlos para asegurarte del buen desarrollo y crecimiento de los arbustos de cara a las próximas temporadas. Hay distintos tipos de podas:

• Poda de flores : debe realizarse durante los dos primeros años. Cortando las flores conseguirás que el arándano crezca.
• Poda de mantenimiento: eliminación de ramas sobrantes para que el arbusto se airee y tenga una mejor imagen. Se debe realizar durante el invierno.
• Poda de fructificación : debe realizarse a partir del tercer año, para eliminar las ramas que ya tienen unos años de producción, dado que ya son viejas y los frutos normalmente crecen en las ramas más jóvenes.

Recuerda que el cuidado y buen mantenimiento de la tierra y del arbusto es imprescindible para cultivar una planta silvestre como es el arándano.