Cómo caminar con muletas
Por:
Danilo Perez Ochoa
|
Lima, Los Olivos ,
Peru
|
37 años
|
Hombre
Publicado el
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Salud
¿Estás lesionado y debes llevar muletas ? ¿No tienes ninguna práctica con ellas? Es muy importante que camines bien con muletas para no acabar con algún problema adicional de salud por cogerlas y apoyarte mal. A continuación te damos algunas pautas recomendadas para ir con muletas . Piensa que, si vas a estar un tiempo con ellas, merece la pena que lo hagas bien para no adquirir malos hábitos e incluso más lesionado. En Perudalia.com te contamos cómo caminar con muletas.
Para empezar a caminar correctamente con muletas debes colocarlas a la altura correcta. Siempre debe haber una distancia entre tu axila y la parte superior de la muleta. Nunca deben ir pegadas a los costados del cuerpo ni a excesiva distancia del mismo porque en ambos casos son malas posturas para el cuerpo y producirán cierto desequilibrio.
El reposa manos de la muleta debe ir siempre a la altura de las caderas. Normalmente esta pieza puede moverse y deslizarse para que quede en la posición que desees. Coloca esta pieza donde tu mano se apoyará en el lugar adecuado y aprieta la tuerca bien fuerte para que no se mueva cuando la uses. Una vez lo tengas colocado bien debes apoyar tu axila sobre la parte superior de la muleta y debes apoyarte sobre el piel que no esté lesionado.
Debes separar las muletas a una distancia un poco más amplia que tus hombros y un poco frente a ti para que tu cuerpo quepa a través de ellas. Apoya tu cuerpo sobre las muletas y salta ligeramente hacia adelante. Debes ser precavido al apoyarte y no hacerlo sobre tus axilas porque acabarás lesionado y con un posible sarpullido. La postura correcta implica apoyarse sobre las manos y centrar tu peso sobre ellas. Las axilas solo son para que las muletas se mantengan erguidas. Para evitar que te salgan rozaduras en las axilas es recomendable poner un calcetín para que el apoyo esté más acolchado.
Procura siempre ajustar las muletas para que cuando estés de pie con las manos en los lados, la pieza reposa manos debe quedar justo bajo tus palmas y tus brazos deben quedar a 4 centímetros del codo. Siempre que camines debes colocar el apoyo de tu muleta con el pie lesionado y a cierta distancia de los hombros. A medida que te vayas curando empezarás a dar pasos más largos pero las muletas nunca deben llegar más allá de los dedos del pie dañado porque si no podrás por empeorar tu lesión.
Nunca debes coger el agarre con mucha fuerza porque podrías terminar con calambres en los dedos y con las manos entumecidas. Debes mantener siempre las manos algo ahuecadas así aliviarás la presión en las palmas y podrás recorrer más distancia con mayor comodidad.
A la hora de subir escaleras con muletas debes tener mucho cuidado para no hacerte daño. El truco para no perjudicarte es no usar los brazos, sino la pierna sana. Ponte frente las escaleras y valora la mejor forma de subir. Independientemente de dónde esté la barandilla pon la muleta en la otra mano. Debes tener una mano libre y otra con muleta sobre la que apoyar tu peso.
A continuación debes levantar la pierna sana para subir el primer escalón y usar la pierna para impulsar el cuerpo hacia arriba; ve repitiendo este proceso hasta que llegues a lo más alto. Recuerda que tus brazos son solo un apoyo mientras tu pierna sube. A la hora de bajar escaleras con muletas , debes poner la pierna lesionada y las muletas en el escalón delantero y con la pierna sana bajar todo tu cuerpo. Para que no olvides la regla básica la pierna buena es la responsable de mover todo el cuerpo.
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